Piden que se detengan obras del Tren Maya en Yucatán por emergencia sanitaria
La asamblea maya Muuch Ximbal, que aglutina a personas de 25 pueblos mayas de Yucatán, presentó un amparo para que se detengan los trabajos del Tren Maya en la emergencia sanitaria. Advierten riesgos de contagio e impedimento para participar en su construcción.
Texto: Arturo Contreras Camero
Foto: Isabel Mateo / Especial
“No es posible que se pretenda avanzar con el proyecto en una situación de no normalidad, como esta contingencia”, dice sobre los trabajos preparativos para el Tren Maya Pedro Uc Be, escritor y activista de la península de Yucatán.
Pedro, junto con un conglomerado de organizaciones sociales y la asamblea maya Muunch Ximbal, presentaron un amparo en contra del acuerdo presidencial del pasado 6 de abril en el que se establecen qué actividades deben parar durante la pandemia y cuáles son actividades esenciales.
El acuerdo señala que la construcción no es una actividad esencial, por lo que podría parar. Sin embargo, las obras de infraestructura del gobierno federal, como el aeropuerto de Santa Lucía, la refinería de Dos Bocas y el Tren Maya, no suspenderán sus actividades durante la pandemia.
En la demanda se pide que se suspendan las obras, porque pone en riesgo la salud de las comunidades cercanas al no guardar la sana distancia. Además, al realizarse obras relativas al proyecto cuando la gente está resguardada en su casa, su participación en el proyecto disminuye.
“Impiden que podamos participar, como comunidad, en la construcción y análisis de impactos sociales y ambientales”, dice al respecto Jorge Fernández, abogado de Indignación, una organización social que acompaña el amparo de Muunch Ximbal.
De acuerdo con el abogado, el día que presentaron el amparo, hace dos semanas, pareció como si el Poder Judicial hubiera querido impedir aceptar su demanda de amparo.
“No nos lo querían aceptar porque decían que ‘no era urgente’. Después de un tiempo de estar en ahí, lo aceptaron y nos dieron sello de recibido, pero nos dijeron que lo iban a revisar hasta que termine la cuarentena”, cuenta el abogado.
Aplazar de es manera el amparo de la asamblea indígena lo dejaría en automático sin efecto, pues quieren impedir algo que pase durante la propia cuarentena. Al respecto, Pedro Uc Be asegura que es como un tipo de totalitarismo para impulsar el proyecto del tren.
“Nos parece grave que se quiera instaurar un tipo de totalitarismo. Que el Poder Judicial no haga el contrapeso que se supone es parte de su quehacer es grave y no le da al país la garantía de que es un poder que va a ver por sus derechos”.
Hasta el momento en el estado de Yucatán no se ha iniciado ninguna obra de construcción referente al Tren Maya. Sin embargo, en varias localidades ya hay trabajadores y encuestadores que hacen sondeos y cabildeos entre la gente para levantar información.
“Ese es un argumento que los jueces nos hacen, que ¿cuáles obras queremos parar? Es aquí donde quiero subrayar que es una pregunta con ojos de occidente y no con los ojos de los pueblos mayas. Nos preguntan que cuál es nuestro interés jurídico, ponen en duda nuestro ser indígena y nuestra identidad. Como si necesitaran un papel firmado por un gobierno que diga que somos indígenas”.
“Es muy grave que nos quieran juzgar desde esa mirada occidental y no desde nuestra propia mirada”, asegura el escritor y activista. “El del tren es un plan para acabar con los pueblos. Así como los templos católicos fueron construidos sobre los templos mayas, hoy quieren construir un tren sobre nuestra cultura indígena”, acusa.